La comarca del Aranda es conocida por la importante industria del calzado
Aunque su economía depende fundamentalmente de esta industria, la comarca del Aranda es mucho más que el calzado. Durante siglos la agricultura y ganadería fueron la principal actividad económica del territorio y aunque a nivel agregado ocupan hoy en día un lugar testimonial en la economía comarcal, su papel es muy importante para la vertebración del territorio, puesto que son la principal actividad en los núcleos más pequeños.
Centralizada en Brea de Aragón e Illueca, la industria del calzado se desarrolló a mediados del siglo XX y se ha convertido en la principal actividad económica en la comarca. Los polígonos industriales de estas dos localidades aglutinan un importante número de empresas implicadas en todo el proceso de fabricación y distribución de calzado. Esta industria emplea a más del 50% de los trabajadores de la comarca y recibe asimismo a trabajadores de comarcas vecinas.
Sin embargo la fortísima competencia en precios de las economías asiáticas ha desestibilizado el mercado en los últimos años, creando cierta incertidumbre en el futuro de economía comarcal. Iniciativas como el Cluster del Calzado quieren renovar el sector y apostar por el diseño, la innovación, la imagen, la internacionalización y la cooperación como ejes estratégicos para el futuro de la actividad.
La construcción genera asimismo un importante número de puestos de trabajo. Y lo hace en empresas repartidas por casi todas las localidades, contribuyendo a la cohesión del territorio.
El sector servicios se posiciona como segundo sector de importancia por volumen de trabajadores. Junto a las tradicionales actividades comerciales y al transporte (ligado a la industria del calzado), el turismo y otras iniciativas comienzan poco a poco a configurar una nueva vía de dinamización de la vida económica y social de la comarca.
Desde principios del siglo XX la comarca del Aranda se enfrenta a un preocupante fenómeno de concentración poblacional. En un corredor de apenas 12 kilómetros en el valle del Aranda, las localidades de Illueca y Brea componen un denso espacio urbanizado-industrial, que concentra los servicios y puestos de trabajo.
Mientras estas localidades han aumentado su población, el resto de la comarca se ha ido despoblando paulatinamente, quedando distribuida en núcleos separados y poco accesibles. Son dos realidades económicas y demográficas: una más urbanizada, industrial y rejuvenecida y otra más rural y envejecida.
En Illueca y Brea vive aproximadamente el 65% de los 7.627 habitantes de la comarca. Si sumamos la población de Gotor, Jarque y Sestrica que cuentan también con pequeñas industrias y con una importante agricultura, el porcentaje se dispara hasta el 84%.
La despoblación y la excesiva dependencia de un monoproducto, junto con la recuperación de la agro-industria y el desarrollo del sector terciario, incluido el turismo, la educación, la formación permanente y la integración de nuevos residentes son los grandes retos a los que se enfrenta la comarca del Aranda en los próximos años.